sábado, 4 de febrero de 2017

Burocracia enquistada

"¿Podrá el Gobierno hacer algo contra una estructura burocrática?"

OTRAS CARTAS. Voces, reclamos y esperas de jubilados
"¿Podrá el Gobierno hacer algo contra una estructura burocrática?"
VIOR
Los jubilados que residimos en países sin convenio con la ANSeS, necesitamos tener un secretario en la Argentina que nos atienda el complicado trámite de supervivencia que comienza con apersonarse en Frankfurt, Alemania, en el Consulado, que en mi caso está a 100 kilómetros, o enviar carta con la supervivencia otorgada por la Municipalidad de la ciudad donde vivimos, esperar que el consulado nos devuelva por correo un certificado firmado por el cónsul, enviarlo a la Argentina adonde nuestro secretario tiene que llevarlo primero al Ministerio de Relaciones Exteriores para ser legalizado (porque la firma del cónsul argentino aparentemente no tiene valor) y luego pedir turno en la ANSeS para presentarlo, trámite que puede llevar una mañana entera.
Esto hay que hacerlo dos veces por año. ¿Podrá el Gobierno del ingeniero Macri simplificar las cosas para que simplemente enviemos por correo al consulado la supervivencia dada por la Municipalidad de la ciudad en que residimos, y con un simple aviso del consulado argentino por Internet, la ANSeS sepa que estamos vivos? Calculo que en el consulado de Frankfurt no debe haber registradas muchas personas jubiladas argentinas residentes en esta región de Alemania. Los funcionarios son atentos y tienen la mejor disposición, pero no pueden hacer nada contra una estructura burocrática antigua y patética, que espero puedan desarmar pronto.
Enrique Fischer
PIPO PESCADOR
fischerhenrich@gmail.com

Voces, reclamos y esperas de jubilados
Mi marido, Adrián R. González de 69 años, docente jubilado con 42 años de aportes, sufre de una rara y grave enfermedad: hipertensión de la arteria pulmonar. Por ello está con oxigeno las 24 horas en silla de ruedas para movilizarse porque se fatiga y tiene colocada una bomba infusora subcutánea (CADD MS3 Modelo 7400) que le proveyó el PAMI hace 18 meses y por medio de la cual recibe un medicamento (Treprostinil 10 mg) que no se puede suspender con riesgo de vida.
La bomba se rompió y no se puede reparar, desde septiembre estamos pidiendo al PAMI su reposición. La importadora, Macor, (la única) no se presenta a licitación por deudas de PAMI con ellos y todas quedan “desiertas”. Estamos usando una bomba de repuesto pero si se daña, corre serio riesgo la vida de mi marido.
Creo haber agotado todos los recursos (PAMI San Justo, PAMI Central) sin suerte. Le por favor al doctor Carlos Regazzoni si nos podría ayudar, estaríamos eternamente agradecidos. El beneficio de mi marido es el número 150362077400, con número de pedido por Urgencia Médica 80875.
Susana Rivas
susygon59@gmail.com

Mi abuela, Angela Nora Robles, tiene 88 años y padece discapacidad mental, demencia senil avanzada y se encuentra postrada. Carece de vivienda propia, sólo percibe la jubilación mínima de $ 6.700 y tiene una única hija que es sostén de familia.
El 9 de enero de 2017, en forma intempestiva, PAMI le retiró la internación domiciliaria y la enfermera que la atendía. Cabe destacar que el estado de salud de mi abuela es extremo, y el retiro de la misma representa un peligro de suma gravedad que podría llevar al deceso. Esta situación de total abandono por parte de PAMI fue llevada a la Justicia, la cual mediante una medida cautelar otorgada a su favor, en el marco de un amparo de salud por la urgencia de la situación, el día 24 de enero obligó a PAMI a que cumpla con el servicio de atención domiciliaria de 24 horas. Fueron intimados nuevamente y continúan sin cumplir con la medida cautelar.
Sé que las decisiones adoptadas por los jueces dirigidas a los organismos deben ser obedecidas y cumplidas de inmediato. Acatar y cumplir las sentencias es la forma de respetar nuestro derecho.
Josefina Barruti
jose.barruti@gmail.com
Soy un jubilado de 89 años que realizó el trámite de Reparación Histórica firmando el acuerdo en la oficina de la ANSeS de Lugano, en el mes de octubre. En dicha reparación se me adjudicó una cifra importante de dinero que duplicó con creces mi sueldo actual. Lo solicitado y requerido para realizar los trámites se cumplió en tiempo y forma gracias al acompañamiento de mis hijos, ya que no puedo movilizarme por mis propios medios.
Se nos informó que el acuerdo debía ser homologado en el Ministerio de Justicia y a partir de esa homologación se efectivizaría el pago retroactivo al mes de octubre. Soy insulinodependiente, tengo estenosis aórtica aguda, poca visión y menos oído. Al momento de escribir esta carta aún no recibo el “beneficio”- derecho otorgado-.
¿Qué espera este Gobierno para cumplir con lo que denominaron un enorme reconocimiento a los “viejos”? ¿O es que nos han engañado? ¿O piensan que mi cuerpo esperará mucho tiempo más a que decidan reconocerme?
Osvaldo Clementoni
mgc0004@hotmail.com

El secretario Legal y Técnico de la ANSeS informó que se establecerá un nuevo sistema de puntaje (¿otro más? ) para fijar orden de prioridad y transparencia en el pago de las sentencias firmes. Tras años que la Cámara Previsional en mi caso produjo sentencia firme ratificada por la Corte Suprema y a punto de cumplir 90 años, me carcome la curiosidad de querer conocer qué otro requisito pueda exigírseme para ser privilegiado en el pago de lo adeudado.
“Con paciencia, el Cielo se gana”, dice el refrán. Emulando al personaje bíblico del Antiguo Testamento, Job, sólo me resta seguir aguardando, y si no se me cancela el pago en vida, cuanto menos tendré la esperanza que por mi larga y paciente espera, ganaré el Cielo.
Adolfo Outes
aoutes@hotmail.com

Como jubilado me preocupa que el PAMI quite el subsidio social a los jubilados que cobran más de $ 8.500 mensuales o tengan una prepaga, limitando a sólo los indigentes por su vulnerabilidad social, el derecho a percibir los remedios gratis. Con el mismo criterio pueden quitar la atención médica gratuita porque tendrían donde atenderse.
Se está desnaturalizando el propósito del PAMI, pensado inicialmente como obra social de jubilados y excombatientes, para transformarla en obra social para indigentes. Por supuesto que podemos optar por otras obras sociales, pero las mismas no están especializadas y ni orientadas a la vejez.
Incluso el personal de PAMI se especializó en personas mayores que tiene características específicas. Los indigentes tienen otras particularidades y deben tener una cobertura más afín a su problemática.
José María Villa
josemariavilla@hotmail.com

Tengo 70 años, soy jubilada y cobro la mínima. Me operaron de cáncer de mama hace ya 4 años. Después de hacerme quimioterapia y rayos, me recetaron la medicación, la cual debo tomar diariamente durante 5 años.
Habiendo presentado los estudios que está pidiendo PAMI para entregar los medicamentos, tuve que interrumpir mi tratamiento porque no me entregan el remedio oncológioco.
Estoy muy preocupada por esta situación, no entiendo qué es lo que está pasando, por eso decidí dar a conocer mi caso en esta carta al diario Clarín.
Por esta situación, hace días días que llamé a PAMI Central, donde me dijeron que autorizaron mi medicación en 72 horas, pero al momento de escribir esta carta, la farmacia todavía no me la entregó.
No encuentro una respuesta favorable a mi problema, la realidad es que tuve que discontinuarmi tratamiento oncológico y no puedo esperar más esta medicación.
María Bertonasco
bertonascomaria@gmail.com

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